Lucía y Maxi nos comparten este bello relato de lo vivenciado y caminado durante estos días ¡Gracias!
“Con la entrada de este nuevo año hemos tenido el regalo de recibir a Maxi, joven claretiano de Temuco que decide entregar su tiempo y toda su energía, ganas e ilusiones en el encuentro con otras formas de caminar, con otras formas de ser Iglesia, de luchar por la justicia y la paz a la que Jesús nos llama e invita. En este primer tiempo hemos dispuesto nuestro corazón en salida. Con la guitarra siempre cerca hemos visitado el Hogar de Adultos Mayores tratando de hacer presencia a través de la música. También hemos comenzado a organizarnos para llevar a cabo visitas en los barrios tratando de acompañar la soledad que tan presente está en muchos hogares.
En todo este caminar Dios nos ha regalado la compañía y el consejo de personas de Jacobacci, que siempre están presentes en nuestro día a día, facilitándonos su ayuda, entrega y disposición en este camino de misión. Además, siempre están ahí para cuidarnos y colaborar en la construcción conjunta de una experiencia lo más cercana y plena posible. En este primer tiempo no han faltado las visitas a los parajes compartiendo vida, charlas sobre la mesa, mates, mucha música, juegos y un cielo espectacular que nos acompaña siempre.
Seguimos con el corazón dispuesto a arder en caridad, y a través del ejemplo de san Antonio María Claret, seguir construyendo lazos de unión, de fraternidad, de comunidad y de alegría. Siempre agradecidos por todo el amor de este pueblo que nos ha recibido tan generosamente con los brazos abiertos (Lucía Muños y Maxi Valenzuela, Voluntarios en la Misión Sur)”.
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